La separación de los rayos conforma una trama fresca y permeable, evitando el calor y emulando las antiguas técnicas de tejido Maya. Fueron los nativos de Acapulco los que lo crearon cuando buscaron una forma cómoda de tomar el sol, especialmente en una época en la que se vivía un boom turístico y se buscaba aportar más comodidad y servicios a los turistas.
El diseño ha disfrutado de un éxito continuo durante casi cinco décadas, siendo el favorito de los diseñadores por sus líneas limpias y su comodidad. Fue fabricado por varios talleres artesanales en México, desapareciendo poco a poco del mercado en los inicios del siglo XXI.
Después de varias mejoras en el diseño, la silla vuelve a estar disponible con una estructura de acero y un tejido de cables de PVC flexible que dan forma al asiento, garantizando su durabilidad y calidad gracias a sus materiales de gran calidad. Aunque originalmente parece que fue creada para espacios exteriores, hoy en día puedes usarla tanto dentro como fuera de casa.
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